-137- ES NECESARIO CONSTRUIR SOBRE ROCAS

Contra toda desesperanza debemos seguir teniendo fe y, a pesar de todo, seguir en acción.
Eso es ir construyendo nuestra vida sobre rocas, poniendo en práctica lo que nos parece bien y no solo escuchar pasivamente nuestro interior y exterior.
Si no asentamos nuestras acciones en los valores y principios que debemos tener, nuestra vida quedará a la deriva, en la pura apariencia, y siendo nuestras bases tan débiles es fácil que se las lleve el agua del río.
Si somos de los que nos sentimos inseguros e inestables en nuestros valores y principios, debemos empezar por darles prioridad, a fin de que nos podamos apoyar en una roca firme y segura, que será el asiento de nuestros pensamientos y acciones.
El viento y el agua se llevan y derrumban las casas mal construidas. Lo mismo pasará con nuestra vida, si no hemos sabido construir una casa interior con cimientos realmente estables.
Si hemos pasado por una crisis existencial no permitamos que vuelva a suceder por nuestra debilidad interior.
Si estamos atravesando por una crisis existencial, reflexionemos muy seriamente sobre las posibles causas y si necesitamos ayuda busquemos la que consideremos necesaria para afianzar de una vez por todas nuestra vida en roca.
Si no hemos sabido de crisis existenciales, esto puede significar dos cosas: o que estamos bien encaminados y firmes sobre las rocas, o que inconscientemente hemos ido viviendo a ciegas y podemos llegar a sufrir una crisis.
Reflexionemos, investiguemos un poquito en nuestra vida interior y démonos cuenta si estamos realmente firmes o si nos puede llevar el primer vendaval.
Dediquemos un poco de tiempo cada día a nosotros mismos y, lejos ya del mundanal ruído, meditemos sobre lo que es nuestra vida, si sus bases son sólidas y firmes o si necesitan un ajuste, una revisión de los valores y principios un poco olvidados.
No cometamos el error de afincar nuestro desarrollo y nuestra evolución en tierras movedizas. Sería un error.

-61- ¿QUÉ SIGNIFICA SER, SER MÁS?

"Ser o no ser, esa es la pregunta". Una frase universalmente conocida en la cual la mayoría no entendemos su significado.
Meditando un poco podríamos decir que ser es ser uno mismo, como uno es, lo que uno es, y uno es "un haz de potencialidades que deben ser actualizadas a lo largo de la vida". La vida es un proceso dinámico. Es un devenir, un continuo "llegar a ser".
"Llegar a ser" es el proceso continuo de realización que termina con la muerte. Por lo tanto, el ser no es estático. El ser es un potencial que tenemos a nuestra disposición para ser desarrollado. Palpita en nuestras entrañas lo que somos y lo que podemos llegar a ser. Hay un yo interior que nos guía, siempre que le hagamos caso. Es el verdadero yo, el auténtico, el que nunca nos engaña. Es el yo-Ser. Para esto es necesario conocerlo y darnos cuenta "de lo que soy yo".
Ser cada vez más uno mismo o no lo que los demás o el mundo quieren que seamos. Para ser continuamente en nuestro proceso de desarrollo debemos ir tomando conciencia de lo que somos, de lo que hacemos y por qué lo hacemos. No podemos llevar una vida más inconsciente que consciente y a la vez pretender realizarnos y desarrollarnos. Para ser cada vez más no hay otro camino que la toma de conciencia de uno mismo y de la realidad que nos rodea.
Es un proceso de maduración con caminos muchas veces llenos de espinas. "El sufrimiento que condiciona nuestro desarrollo no nos debe arrastrar a la depresión o al derrotismo. Antes al contrario, debemos vivir la belleza de cada instante, sin miedo ni impaciencia, que son los enemigos de la perfección".
No somos un ser fijo, quieto, estático, invariable. Somos un continuo devenir, por eso es importante ser como somos para poder desarrollar ese "ser como somos" acorde con "lo que somos" y no intentando ser otro, yendo en contra de nuestra constitución innata, yendo en contra de lo que tiene que ser desarrollado acorde con nuestras potencialidades y no acorde con las potenciales del otro.
Si somos nosotros mismos, no somos. Si no hacemos el esfuerzo y el sacrificio por desarrollarnos, no somos. Y al no ser, difícilmente le encontraremos un sentido a la vida. Desarrollo mental, espiritual y acción deben combinarse para llegar a ser, ser más continuamente.
Ser, hacer, tener: para vivir son necesarios los tres, pero la base de la vida es ser. Es desarrollar nuestra realidad interior.

-128- HAY QUE SUPERAR LAS DEPRESIONES

El suicidio es la máxima expresión de la depresión.
Es posible que en ciertos momentos de nuestra vida, por propia naturaleza o por problemas difíciles, hayamos pensado en desaparecer, llegando la imagen del suicidio a nuestra mente.
Sin embargo, hemos superado el problema de alguna manera y no hemos vuelto a preocuparnos por esas depresiones tan fuertes.
Pero es posible que una naturaleza sea tan propensa a la depresión y el problema que se presenta sea tan grave, o por lo menos que la persona lo vea tan grave y tan superior a sus fuerzas y sus capacidades, que tome la decisión de suicidarse en un momento de plena crisis interior.
Si hemos tenido experiencias con ciertas depresiones, debemos darnos cuenta de que su causa puede derivar de nuestra propensión al pesimismo y a la auto compasión que nos hacen ver los problemas más grandes de lo que son en realidad.
También una muerte, una enfermedad grave, el estar sin trabajo, un problema matrimonial serio, etc, puede ser causa de depresión y es importante que nos demos cuenta de ello y así poder superar ese estado de ánimo haciendo lo necesario y poniéndonos en las manos de Dios con plena fe y confianza.
Dios nos iluminará y nos mostrará el camino y lo que tenemos que hacer para vencer la depresión.
Cuando nuestras fuerzas de reserva se sientan vencidas por la depresión, debemos buscar siempre compañía positiva y optimista, alguien que nos sepa escuchar, y si es necesario y conveniente buscar ayuda profesional.
El problema de la depresión puede ser un círculo vicioso de malestar y pesimismo, donde vemos todo tan negro, complicado y difícil, que la propia depresión puede ir en aumento si no buscamos la ayuda a tiempo, sea familiar, del amigo o profesional.
Es importante, si la depresión es muy grave, darse cuenta a tiempo de que uno puede perder el control, no ser ya dueño de sí, y así encaminarse al fatal suicidio.
Cuando comienzan los síntomas de una depresión debemos pensar en las personas que nos rodean, en nuestros hijos, en nuestro cónyuge y volcar nuestro amor hacia ellos y otras personas.
Creamos profundamente en que todo tiene solución y que con acción y fe y experiencias pasadas ya superadas, se puede ver la vida de otro color.